El sistema capitalista-patriarcal ha querido dominar el cuerpo de las mujeres, negándonos la capacidad a decidir sobre nuestro cuerpo y nuestra sexualidad, y al mismo tiempo, controlar nuestra capacidad reproductiva en función de las necesidades del sistema capitalista. La obligación de la virginidad así como la maternidad, han sido una constante a lo largo de toda la historia de los sistemas dominantes. Estos, basándose en la dominación y explotación han utilizado a las mujeres en función de sus objetivos económicos y sociales, y todos han coincidido en invisibilizar a las protagonistas capacitadas para la creación de la vida.

No obstante, las mujeres a lo largo de la historia hemos encontrado estrategias para decidir si ejercemos o no la maternidad. El acceso a conocimientos sobre la naturaleza terapéutica de las plantas, y el rol de cuidadoras ha facilitado las practicas de control de la maternidad.

Actualmente la crisis provocada por el sistema capitalista-patriarcal es la excusa para atacar los derechos de las mujeres.

No obstante, las mujeres a lo largo de la historia hemos encontrado estrategias para decidir si ejercemos o no la maternidad. El acceso a conocimientos sobre la naturaleza terapéutica de las plantas, y el rol de cuidadoras ha facilitado las practicas de control de la maternidad.

Actualmente la crisis provocada por el sistema capitalista-patriarcal es la excusa para atacar los derechos de las mujeres.

En una situación de recortes de derechos sociales y laborales, la derecha española pretende acabar con nuestras conquistas feministas, conseguidas en luchas a lo largo de los últimos 70 años.

Hay un ataque constante para evitar que las mujeres tengamos acceso a la IVE ( Interrupción Voluntaria del Embarazo). Sólo el 3% de las IVEs se practican en la Sanidad Pública, lo que se traduce en grandes dificultades para ejercer el derecho al aborto, sobre todo de mujeres jóvenes o aquellas sin recursos económicos.

La jerarquía de la iglesia católica más retrógrada, y los grupos católicos más ultraconservadores, están realizando una campaña muy agresiva y fascista contra nosotras, las mujeres.

Los recortes laborales y los masivos despidos, apoyados por las continuas reformas laborales están expulsando a las mujeres del mercado laboral. Nos encontramos que los recortes de los servicios públicos obligan las mujeres a hacer de cuidadoras de las personas dependientes, eso sí, sin salario o con salarios precarios. Las trabajadoras del hogar están sufriendo despidos porque las “empresarias” y las ETTs no quieren hacer contratos legales. La presión contra las parejas no normativas es cada vez más grande. La violencia del sistema capitalista-patriarcal aumenta y las mujeres jóvenes sin recursos económicos se ven abocadas a los abortos clandestinos o a maternidades no deseadas. Todavía no sabemos si el re-pago afectará a la píldora del día después, pero hay que estar atentas y prepararnos para luchar contra este nuevo recorte.
La lucha del feminismo y de muchos grupos de mujeres desde los años 70, hemos conseguido la modificación de la Ley que permite no tener que justificar el aborto dentro de las primeras 14 semanas. Hay que recordar los impedimentos que sufren las mujeres para poder poner en practica éste derecho, puesto que en algunas comunidades (Navarra) no se aplica la ley IVE o el caso de las mujeres inmigrantes que no pueden ni podrán practicar abortos en la Sanidad Pública.

Destacar la importancia de la formación y la prevención, aspectos ambos invisibles, tanto en las instituciones formativas como en las sanitarias. Con la desaparición de los Centros de Planificación Familiar se complica la consulta de anticoncepción y temas relacionados únicamente con la salud sexual. Con la invisibilización de la prevención, dejándola en manos de las mujeres, pasa a ser nuestro problema, no el de las dos partes componentes de la pareja.

 

El 28 de septiembre, Día Internacional por la Despenalización del Aborto las mujeres y los hombres de la CGT continuamos luchando por el «derecho de las mujeres a la auto – determinación de su cuerpo» tal y como Federica Montseny, Ministra de Sanidad y Salud al 1936 definió el derecho al aborto.

Reclamamos:

  • Despenalización de la IVE y la garantía en cada comunidad de su aplicación.

  • Aborto libre y gratuito en la Sanidad Pública. No a la objeción de conciencia en los hospitales de la red pública.

  • Garantías para una educación afectivo-sexual en libertad y no hetero – normativa.

  • Derecho a la información de todos los métodos anticonceptivos. Anticonceptivos gratuitos.

  • Derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo sin límite de tiempo. Las mujeres parimos, las mujeres decidimos.

  • Derecho de las mujeres a disfrutar de un proyecto de vida propio. Leyes laborales que permitan puestos de trabajo adecuados a las mujeres para que disfruten del derecho a la maternidad.


Fuente: Secretaria de la Mujer SP CGT

28 de septiembre Día por la despenalización del aborto